respirar por la boca

EL SÍNDROME DEL RESPIRADOR ORAL

¿En qué consiste?

En respirar por la boca y no por la nariz, este hecho es un problema serio. Tanto que debería  preocupar a los padres, dentistas y otorrinolaringólogos.

Los efectos en la salud oral y en general de respirar por la boca de manera habitual,  pueden ser muy perjudiciales. Especialmente cuando afectan a los más pequeños.

Respirar hace que el oxígeno llegue a los tejidos y se retire el dióxido de carbono producido por la actividad metabólica celular. Este proceso es necesario para mantenernos con vida.

Cuando se presentan dificultades para respirar y llevar el aire a través de las fosas nasales, este acto involuntario  se convierte en un problema para el paciente donde  podría llegar a coger el aire por la boca.

¿Cuáles son las causas y a quién afecta?

Las personas que toman aire por la boca habitualmente se debe a diferentes causas. La obstrucción de la vía aérea superior, alteraciones anatómicas, flacidez en la musculatura perioral o por diferentes hábitos viciosos que tiene el niño son algunas de las causas más comunes. La respiración oral puede afectar tanto a lactantes, como a niños y a adultos.

Es verdad que las personas podemos respirar por la boca, en momentos puntuales como cuando hacemos ejercicio o hablamos. El hacerlo de forma habitual cuando dormimos o estamos en silencio es considerado científicamente como una disfunción por hábito. Esta demostrado que, los respiradores bucales por mal hábito son pacientes que en algún momento tuvieron un factor obstructivo. Como consecuencia de ello, se acostumbraron a respirar de forma no fisiológica.

¿Cómo saber si mi hijo es respirador oral?

Se considera respirador oral a todo niño que respira habitualmente por la boca, cuando está en silencio o cuando duerme. No siempre es fácil discriminar por donde respira nuestro hijo. Ver a un niño con la boca abierta no quiere decir que esté respirando por ella.

Para asegurarnos de que el niño es respirador oral, nos deberemos de fijar en otros rasgos característicos como son:

Ruido al respirar: Lo normal es hacer una respiración silenciosa. Cuando se escucha ruido al respirar de manera habitual y el niño no está resfriado es uno de las factores a tener en cuenta.

Niños cansados: No suelen descansar cuando duermen por presentar apneas obstrucctivas del sueño, suelen presentar ojeras. Este cansancio acumulado puede afectar a la atención, cierta irritabilidad, impulsividad, dificultades de concentración…Todo esto puede llegar a repercutir, y no muy favorablemente, en el rendimiento escolar del pequeño

Alteraciones posturales: Los niños que respiran por la boca, inclinan la cabeza hacia atrás. Sus hombros se observan encorvados  hacia delante y el  pecho hacia dentro.  Este patrón  es un mecanismo inconsciente para facilitar y aumentar la cantidad de aire que entra por la boca. Esto repercute en que se altera el tono muscular de la cara, lo que ocasionan distintas malformaciones.  También se observan alteraciones en la morfología de la cara y, por extensión, en el lenguaje.

Alteraciones en el lenguaje: Son niños que se les entiende con dificultad. Una de las posibles causas es que la lengua se encuentre en una posición atípica, permaneciendo en el suelo de la boca o incluso entre los dientes (lo que daría lugar a una malformación en la implantación dentaria). Este posicionamiento de la lengua puede ocasionar problemas para articular algunos fonemas. Los sonidos que especialmente se alteran son  el sonido /s/, que  se sustituiría por el fonema /z/. Esta posición incorrecta de la lengua, junto a la falta de fuerza de los labios, puede también ocasionar problemas a la hora de comer (deglución atípica).

Alteraciones en la fisonomía de la cara: Cuando un niño toma aire por la boca, en lugar de hacerlo por la nariz de forma natural, se ven alterados también distintos aspectos de su anatomía. Esto va a influir en la correcta producción del lenguaje oral. Por ejemplo, si el niño desde muy pequeño se acostumbra a llevar a cabo la respiración bucal, se pueden producir trastornos en el desarrollo del paladar (llegando a ser estrecho y hundido) y de la mandíbula. Otra consecuencia de estar en todo momento con la boca abierta es que los labios pierden su tonicidad. Esto podría dificultar el habla.

 

Desde Elena Anero, logopeda Clínica, te recomendamos que estés atento a como respira tu hijo, si se levanta cansado, si presenta algún fonema distorsionado, si en ocasiones babea o cualquiera de las causas anteriormente citada. por que todo esta relacionado y puede afectar negativamente al rendimiento escolar de vuestro hijo.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

¿CÓMO TU BEBÉ APRENDE A COMUNICARSE?

Es importante que tu bebé en el primer año de vida reciba muchos estímulos. Cuantos más reciba más facilidad tendrá para empezar a comunicase.

La estimulación conseguirá que tu hijo aprenda a hablar adecuadamente. Para ello  hablarle con frecuencia, escucharle con atención y pronunciar bien las palabras, son  algunos de los consejos que desde «Elena Anero Logopeda Clínica» os proponemos.

Es importante también la actitud y el modo en que estimulamos a nuestro bebé.

Hay dos maneras de actuar ante nuestros bebes. El llamado baby talk y la sobre-interpretación. Ambas son  fundamentales para que nuestros hijos desarrollen bien, la capacidad del lenguaje hablado y la comunicación.

 

BABY TALK

Se denomina baby talk a la forma espontánea que emplean los adultos cuando se dirigen y comunican con los bebes.

Se caracteriza por un  habla más despacio, con una voz pausada, o en otras ocasiones a elevar el tono de voz.

Somos más expresivos, utilizamos más gestos, cuidamos la pronunciación y empleamos frases más simples y cortas, y en ocasiones repetimos partes de la frase,  haciendo referencias a objetos.

Aunque se hace de manera inconsciente hace que el bebé comprenda mejor el mensaje. Ayuda a centrar su atención y facilita al bebé  la  imitación y el aprendizaje del lenguaje.

 

SOBRE-INTERPRETACION

Para que el bebé sea consciente y empiece a comunicarse intencionadamente el adulto debe  sobre-interpretar  las acciones del niño,

Cuando hablamos de sobre-interpretar las acciones del bebé nos referimos a que todas las personas que están a su alrededor  padres, hermanos, tíos…deberán  reaccionar de manera sistemática a las  interacciones del niño. Es decir las personas mas cercanas  actuaran como si realmente fueran comunicativas las actuaciones del bebé, mucho antes de que lo sean.

Estas acciones contienen un proceso educativo implícito mediante el cual el adulto manifiesta su deseo de darle al niño herramientas expresivas cada vez más elaboradas.  Además la sobre-interpretación ayuda a comenzar ese intercambio comunicativo  que poco a poco se irá haciendo más complejo y sera la base del aprendizaje del turno de palabra.

A lo largo del primer año de vida

Estas dos estrategias se deben de lleva acabo en los  primeros años de vida de nuestro bebé, para que su desarrollo comunicativo sea el normal a su edad.

Al principio el bebe utiliza su cuerpo como medio de expresión llorando, gesticulando, moviéndose. Y el adulto responde atendiendo esas demandas, tras diferentes repeticiones  causales el niño descubrirá, que determinada actitud por su parte provoca una reacción en quienes están a su alrededor. Siempre que esta reacción se mantenga y sea grata para el niño, este repetirá la acción  que provoco la interacción.

EI niño utiliza una forma de expresarse que quienes le rodean creen entender e interpretan sus actos concibiéndolos como previsibles (cuando hace eso, quiere decir esto), y responden al niño como a un interlocutor con propósitos intencionales (sobre-interpretación).

EI niño va a iniciar la comunicación sólo si siente que su mensaje es entendido. Necesita, por tanto, una base de confianza que debe proporcionarle principalmente la madre ó los interlocutores más próximos. Cuando el niño siente que sus acciones tienen respuesta (si lloro, alguien aparece) y que esta es consistente (siempre que lloro aparecen) y coherente en lo que esperaba (si sonrío, me sonríen, si lloro me acarician ó me cogen en brazos), esta seguridad favorece su relación con el medio y con los demás.

En la siguiente etapa el niño empezará a imitar al adulto a la vez que es el mismo se siente imitado por el adulto. Pensemos en cualquiera de las interacciones habituales con los bebes y como imitamos los sonidos que produce y sus gestos esperando que los repita de nuevo. Se inicia así una especie de dialogo en el que ambos interlocutores son activos.

Muy pronto, el niño comenzará  a mirar alternativamente un objeto, acontecimiento o a una tercera persona que le interesa.  Por ejemplo: madre y niño se miran, la madre mueve la cabeza mirando un objeto (peluche), el niño sigue ese movimiento y mira también el objeto (peluche), vuelve la mirada hacia la madre para confirmar, después la madre  lo coge  y se lo da.

Una vez que los niños son capaces de seguir la mirada del adulto, se recurre a gestos para llamar la atención para transmitir información al adulto.

Otro ejemplo pudiera ser: El niño ve su camión de juguete preferido que está fuera de su alcance. Llama la atención de la madre mediante gestos, golpes o emitiendo sonidos, la madre le atiende, dirige la mirada hacia el camión , mira de nuevo a la madre y espera. Si la madre le entiende, probablemente le dirá ¿quieres tu camión  … ? y se lo dará lo que le permite al niño, sentirse entendido, y por otro escuchar la palabra «camión» . Si la reacción de la madre no es la que espera, repetirá el proceso, con mayor insistencia si ha comprobado en anteriores ocasiones  le ha dado resultado.

Mis recomendaciones

Es necesario que en el primer año de vida de nuestro bebé, observemos este tipo de conductas, son  más importantes  que si nuestros bebé es capaz de decir  más o menos vocalizaciones.

Tu hijo no te hace caso cuando le señalas  un  objeto, si no se inmuta cuando ve su juguete favorito lejos de su alcance. No pierdas tiempo, aprovecharte que el cerebro de tu hijo tiene mayor plasticidad y una estimulación temprana hará que mejore su desarrollo posterior. En Elena Anero, logopeda clínica, lo valoramos para saber si su desarrollo evolutivo es  más lento, o difiere del desarrollo normal y si es necesario brindarle una estimulación temprana de calidad.