¿Qué es la afasia?
Afasia, es una disfunción del lenguaje que puede involucrar una alteración de la comprensión de palabras.
Los centros del lenguaje de la corteza cerebral y los ganglios basales también se pueden ver afectados.
Tipos de afasias
En función de la parte lingüística que queda más afectada, la afasias se pueden clasificar en:
Afasias de expresión (motora, no fluente o de Broca)
Se produce por la lesión de la circunvolución frontal inferior (área de Broca) izquierda y áreas adyacentes.
Se caracteriza por la dificultad de producir lenguaje. Aunque, la comprensión y la capacidad para conceptualizar están relativamente preservadas.
Es común que los pacientes con este tipo de afasias muestren un lenguaje oral muy reducido.
Afasias de recepción (sensitiva, fluente o de Wernicke)
Está causada por una lesión en áreas temporo-parietales.
Esta lesión acarrea dificultades para descodificar y comprender el lenguaje.
Los pacientes pueden hablar con oraciones largas (logorrea), las cuales no tienen ningún significado.
Afasias de conducción
Se produce por una lesión de fascículo arqueado que conecta el área de Broca y de Wermicke. Se caracteriza clínicamente por dificultades en la repetición.
En este tipo de afasias, la expresión oral es fluente, con parafasias fundamentalmente fonémicas.
En el plano de la compresión oral, la comprensión lectora se conserva.
Afasias sensoriales transcorticales
En este tipo de afasias, el output verbal es fluido pero la comprensión es muy limitada. No obstante, la repetición, al igual que en el resto de afasias transcorticales, está conservada.
Afasias motoras transcorticales
Aparece por lesiones corticales y de sustancia blanca en las regiones prefrontales y premotoras que rodean el opérculo frontal.
El paciente con afasia motora transcortical sufre una reducción importante del habla espontánea.
Esta particularidad contrasta con su repetición, ya que pueden llegar a repetir frases bastante largas.
Afasias anmésicas
Se trata del tipo de afasia más leve y frecuente, la cual se produce por lesiones en diversas localizaciones o por el déficit residual de otras afasias tras un proceso de rehabilitación.
La afasia anmésica se caracteriza por una importante dificultad en la denominación, junto a una expresión fluida, una comprensión relativamente preservada y una capacidad para la repetición caso normal.
Asimismo, presenta como aspecto preponderante una falta de vocablo, derivada de la incapacidad de beneficiarse de las ayudas. De este modo, el paciente da continuos rodeos para explicarse sin utilizar la palabra que busca (circunloquio), además de utilizar muchas palabras que son poco específicas.
Afasias globales
En este tipo de afasia tanto la comprensión como la expresión están alteradas, debido generalmente, a una interrupción temporal del riego sanguíneo en la arteria cerebral media.
En un primer momento suele aparecer un mutismo total, pasando luego a cierta verbalización, la cual se suele manifestar con estereotipas verbales repetitivas.
Afasias mixtas
Se consideran como afasias mixtas, las formas intermedias de los diversos cuadros afásicos comentados anteriormente.
No obstante, se caracterizan por una pobre habla espontánea y pese a que puede responder con una verbalización fluida corta, la respuesta suele ser una repetición directa de las palabras del otro (ecolalia) sin que exista comprensión.
Cómo Diagnosticar las afasias
Para diagnosticar las afasias, el logopeda debe realizar diferentes pruebas neurológicas y neuropsicológicas tales como la toma de imágenes del cerebro (TC. RM), las cuales permitirán identificar la causa y las zonas afectadas. Asimismo, es importante determinar su efectivamente se trata de una afasia, o si bien se trata de un problema de comunicación surgido de otras alteraciones, como por ejemplo un deterioro de la audición o de la visión.
A la hora de diagnosticar a un paciente afásico el neuropsicólogo y/o el logopeda disponen de varias alternativas para medir los distintos aspectos lingüísticos. Los test que se utilizan con más frecuencia son:
- Test Barcelona revisado: evalúa cuantitativamente las capacidades neuropsicológicas básicas del paciente y mediante una aproximación estadística y psicométrica, permite conocer el estado funcional de las áreas neuropsicológicas más importantes.
- Test de Boston: permite el desarrollo de un perfil cognitivo que refleja las disociaciones condicionadas por la patología cerebral.
Con esta exploración neuropsicológica, se determinará el nivel de disfunción del paciente, así como el tratamiento más adecuado a su caso. Asimismo, se podrá hacer una evaluación potencial del índice de recuperación que podrá tener el paciente tras el tratamiento.
En cualquier caso, la recuperación dependerá de la causa de la lesión, de su tamaño y ubicación, del perfil del paciente, de la extensión del tratamiento del lenguaje y de la respuesta que tiene el paciente frente al tratamiento.