dificultades de aprendizaje

Adaptaciones escolares para niños con Dislexia

¿Cómo un  profesor puede ayudar a los niños con dislexia?

Los niños con dificultades en lectoescritura  suelen sentirse mal dentro del aula. Es el profesor el encargado de revertir esta situación o de no llegar al punto de que el niño rechace leer o incluso ir al colegio.

Si tú como profesor o como padre, haces  una escucha activa a los niños con dificultades de aprendizaje en lectura y escritura, ellos mismos, te darán las pautas para entenderlos.

A lo largo de mi experiencia con niños con dificultades de lectoescritura, he sacado algunas conclusiones que ellos mismos cuando les das confianza,  te comentan para poder ayudarles.

Suelen decir que no les gusta  leer en voz alta porque el resto de la clase les mira, prefieren leer en voz baja.  Les gustaría que les dieran tiempo para preparárse los textos con antelación,  son niños que les gusta leer  en alto como el resto de la clase, pero no tienen las herramientas suficientes.

En su comunión cuando les toca leer lo pasan mal, aunque otros  se aprenden el texto antes de la ceremonia para no cometer errores. (buscan estrategias).

A la mayoría  les gustaría que les  leyesen el examen antes de empezarlo  y que les dieran más tiempo para realizar los controles ya que  nunca les da tiempo a terminarlos.

No les gusta que les corrijan los dictados porque todo su texto aparece en rojo. Les gustaría que le dijesen antes como se escribe las palabras en las que dudan.

¿Qué debemos exigir como padres?

Se trata de facilitarles la carga de lectoescritura para que  no interfiera en los conocimientos.

Lo que proponemos no es que eliminemos la lectoescritura de sus vidas  porque en esta sociedad  necesitamos aprender a leer y escribir. Se trata de que la  lectura y la escritura  se trabajen para que sea funcional pero tener otros recursos de apoyo que les faciliten los conocimientos ( imágenes, vídeos, audios, juegos didácticos…).

Estos niños no tienen dificultades para aprender conocimientos, es más son niños que les gusta aprender y tienen muchas curiosidades.

Desde Elena Anero, logopeda Clínica proponemos dichas adaptaciones dentro del aula.

  • Que estén sentados cerca del profesor con buena luz  y con buena visibilidad.
  • Adaptación del examen, darles mas tiempo,  que respondan de manera oral, hacer el examen en dos días,
  • Evitar copiar de la pizarra.
  • Los textos escolares, dárselos también en audios,vídeo o en otros formatos.
  • Adaptar la cantidad de deberes.
  • Revisarles las agendas, pues no apuntan la información correcta.
  • No obligar leer en voz alta o dejarles preparar el texto que le va a tocar leer.
  • Dejarles prepararse los  dictados.
  • No corregir en rojo. Corregir solo un aspecto  b/v o Z/C.

 

 

logopedia en verano

¿Buscas logopeda en Salamanca para los meses de Verano?

Tres meses de vacaciones

El verano es muy largo y a nuestros hijos les da tiempo a descansar  de sobra.
Muchos profesores recomiendan que el verano es para divertirse. Nosotros como especialistas decimos que cada niño es un mundo. Divertirse no es incompatible para dedicar una hora al día o a la semana a realizar tareas. No se puede generalizar y la situación de cada niño en verano es diferente. Muchos niños van al pueblo con su familia, otros a la playa pero muchos se quedan en casa porque sus padres trabajan y su mejor plan es pasarse las tardes delante del televisor y la consola.
A lo largo del curso, hay niños que acuden al colegio y su nivel de atención y concentración es bastante alto. Ellos  pueden aguantar seis horas lectivas y luego llegar a casa y  tras un pequeño descanso dedicar tiempo a los deberes, a estudiar lo aprendido en clase y hasta acudir a alguna asignatura extraescolar, llegar a casa, cenar tranquilo y mañana sera otro día . Por  suerte o por desgracia  no todos los niños tienen el mismo nivel. Porque no todos tenemos las mismas capacidades.
Otros  a lo largo del curso se van encontrando cansados, pues no todos  hacen el mismo esfuerzo para aprender los conocimientos. Cada niño tiene un nivel. Si no, que se lo pregunten a esos alumnos  que pasaron tardes y tardes con los problemas de matemáticas, aquellos que llegaba  la hora de cenar y le quedaban por hacer cinco ejercicios más. Esos  alumnos en los que, los  día de examen,  su cuerpo entraba en un estado de nervios que  eso solo, ya suponía un desgaste extra de energía. 

¿Qué puedes hacer como padre?

Si quieres evitar que tu hijo el próximo curso, sienta la sensación de no llegar,  de tenerse que esforzar al máximo y prefieres que empiece el próximo curso, más maduro ,más centrado y  más desahogado. Es el momento de ponerse manos a la obra. ¿Cómo? Trabajando  la concentración y atención, la comprensión, la lectura y escritura, todo ello de una forma divertida, individual y personalizada. Esta es la opción que  proponemos.

En nuestra Clínica, los logopedas, en veranos, te ayudamos.